Articulo 1.- Se declara la infección por el Virus de Inmunodeficiencia Humana —VIH- Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida —SIDA- como un problema social de urgencia nacional. Ley General Para El Combate Del Virus De Inmunodeficiencia Humana -VIH- Y Del Síndrome De Inmunodeficiencia Adquirida -SIDA-Y De La Promoción, Protección Y Defensa De Los Derechos Humanos Ante El VIH/SIDA. COMUNICADO DE PRENSA Y LAS ORGANIZACIONES ABAJO FIRMANTES COMUNICAMOS A LA OPINIÓN PÚBLICA. El virus de inmunodeficiencia humana —VIH- es una infección que se desarrolla durante años, disminuyendo las defensas del organismo humano durante años, dando como resultado el desarrollo del Síndrome de Inmunodeficiencia Adquirida —sida- . En Guatemala se han diagnosticado desde 1984 en que se presentó el caso más de 38,000 personas, entre niños, niñas, adolescentes, mujeres y hombres; existiendo un sub registro del 50% de casos que todavía no se conocen. El Instituto Guatemalteco de seguridad social cuenta a la fecha con más de tres mil afiliados que reciben tratamiento antirretroviral. El tratamiento antirretroviral (TAR), es esencial para la vida de las personas que viven con VIH. Desde el año 1996, cuando en la Conferencia Mundial de Sida en Vancouver, Canadá, se demostró que el tratamiento con una combinación de medicamentos que bloquean la replicación (reproducción) del Virus de Inmunodeficiencia Humana (VIH), que disminuyó marcadamente la mortalidad relacionada con el Síndrome de Inmunodeficiencia humana (Sida), han transcurrido 21 años, y en un tiempo récord en la historia humana, una enfermedad que era uniformemente fatal, se ha transformado en una Enfermedad Crónica que puede ser controlada, cuando los pacientes toman sus medicamentos de manera regular y sin interrupciones, concepto conocido como Adherencia al TAR. Estos medicamentos pueden mantener controlada la cantidad de virus en sangre por periodos indefinidos a través de los años, la cual se mide por medio del examen denominado Carga viral, especialmente cuando se alcanzan niveles no detectables por los métodos de laboratorio, actualmente disponibles, aunque de manera irregular, también en el país. Las interrupciones del Tratamiento antirretroviral, se han asociado a fallo al tratamiento denominado fallo virológico, cuando la carga viral se encuentra por arriba de 1,000 copias/ml, o fallo inmunológico, cuando los niveles de Linfocitos CD4 caen de manera significativa, provocando en la persona el aparecimiento o re-aparecimiento de Infecciones oportunistas serias como la Tuberculosis, la Meningitis por un hongo denominado Cryptococcus neoformans u otro denominado Histoplasma capsulatum, para mencionar los tres más importantes relacionadas con mayor mortalidad, cuya presencia nos lleva al concepto de Falla clínica, que es el peor escenario para el paciente que la desarrolla. Por lo anterior expuesto el abastecimiento de medicamentos que componen el Tratamiento antirretroviral, NO pueden ni deben ser interrumpidos, pues compromete la eficacia del tratamiento, que al fallar puede poner en riesgo la vida del paciente afectado.